Danza para celebrar el Día de la Música
El Ballet Nacional de España se suma este evento con el espectáculo 'Ritmos, armonías, melodías'. El Ballet Nacional de España retransmitirá vía streaming sobre las 16:00 h. desde su sede, interpretando una decena de coreografías de su repertorio, entre las que se incluyen obras de Antonio Ruiz Soler y Victoria Eugenia, además de creaciones de su director, Rubén Olmo, y de algunos de los bailarines. Como epílogo, los músicos y cantaores del BNE interpretarán La leyenda del tiempo, el conocido tema de Camarón de la Isla y Ricardo Pachón sobre versos de Federico García Lorca. El bailarín principal Francisco Velasco también participará en la programación que emitirá el Teatro de la Zarzuela bailando el Zapateado de Sarasate, de Antonio Ruiz Soler.
Una vez finalizada la actuación del BNE, es la Compañía Nacional de Danza quien comienza su intervención sobre las 16:45 h. con la coreografía 'Loss', un extracto de Love, Fear, Loss, del coreógrafo brasileño Ricardo Amarante. Con música de Charles Dumont, versión de Nataliya Chepurenko, y la pianista Viktoria Glushchenko, los bailarines Cristina Casa e Ion Agirretxe pondrán sobre el escenario este paso a dos perteneciente a un ballet inspirado en la vida y obra Edith Piaf. Cada paso a dos nos lleva a una experiencia de relación de pareja: Amor, Miedo y Pérdida.
Y para finalizar, 'After Love', una pieza de la coreógrafa mallorquina y solista de la CND Mar Aguiló que recibe hoy su estreno absoluto. Los bailarines Shlomi Shlomo Miara e Iker Rodríguez interpretarán este paso a dos con música original de Daniel Sánchez Rodríguez y la dirección de escena de Joaquín de Luz. La coreógrafa nos cuenta sobre su pieza: ¿Dónde nos despertamos? La experiencia de una noche: un tiempo metafórico que determina un espacio de subversión de las normas establecidas. Las búsquedas frustradas son el comienzo y el fin de un círculo de dinámicas: deseo, tentativa de comunicación, alienación, éxtasis, decepción… los cuerpos contemporáneos se debaten entre la necesidad y el goce en las microconexiones que se establecen en la distancia, mediados por diferentes dispositivos que alteran la consciencia propia del otro.